Servicios sociales sí pero...

A pesar de los recortes y de la disminución de dinero del gobierno y de las autonomías para sostener y mejorar la Ley de dependencia, por ahora, Mª del Carmen y yo seguimos teniendo los servicios sociales que se contrataron para la ayuda que ella necesita e indirectamente para mi que buena falta me hace. El problema que tiene esa ayuda es cuando por algún motivo las coordinadoras del servicio tienen que sustituir a la cuidadora de todos los días o la de festivos y domingos, debido a que no es fácil buscar una auxiliar diferente a la misma hora que el servicio  se presta. Días como Navidad, les complica mucho la coordinación, ya que hay falta de personal y no siempre se encuentra a la persona que sustituye a la hora que tiene que empezar el servicio de ayuda. Hay que tener en cuenta los horarios de los servicios, los traslados del anterior y el siguiente y el tiempo de inicio del servicio de forma que sea compatible con el enfermo. Voy a poner un ejemplo. Mañana, Navidad, ponían un servicio para Mª del Carmen a la ocho de la noche, pero resulta que la cuidadora que ha de prestarlo termina a la misma hora el anterior servicio y se tiene que trasladar a nuestro domicilio, por lo que es imposible que llegue puntual, como mínimo se retrasará un cuarto de hora, con el trastorno que supone para mi esposa el que empiece tan tarde ya que muchos días que empezamos a cenar a las ocho ya empieza a dormitar lo que complica y mucho darle la cena. Los cambios cuando sean necesarios deben ajustarse lo más posible a las necesidades del enfermo y los usuarios podemos ser flexibles para que el servicio que nos prestan pueda retrasarse unos quince minutos pero en nuestro caso no puede empezar a las ocho y cuarto de la noche. Hay que negociar con las coordinadoras para que encuentren la mejor solución para todos. Sé que no es

fácil pero hay que intentarlo mediante el diálogo entre las coordinadoras del servicio y los usuarios.

El gobierno del PP

Estamos asistiendo a un continuo bombardeo de mentiras del gobierno de Mariano Rajoy. Y el primer mentiroso él. Con el pretexto de conseguir el reconocimiento internacional e incluso de tener un puesto no permanente en el Consejo de seguridad de la ONU, respaldado por el Príncipe Felipe, está hablando de que la recuperación ya está en marcha y que España es un país solidario, que respeta los Derechos Humanos y cooperador con el resto del mundo. También tiene la osadía de decir que no se ha tocado el Estado de bienestar cuando ellos lo han hecho añicos. Promete que cuando nos hayamos recuperado de esta nefasta crisis que ya dura demasiados años y que ha empobrecido a una gran parte de la ciudadanía, se volverán a recuperar niveles económicos y sociales que se han perdido lamentablemente. Solo ellos se creen este

autobombo que proclaman a los cuatro vientos, jamás se recuperará el nivel social y de Derechos conseguidos antes de iniciarse la crisis, porque aún siendo cierto de que a partir del próximo año empiece una recuperación social lo perdido perdido queda. Todas las decisiones del actual gobierno(2013) han ido en detrimento del poder adquisitivo de los ciudadanos, de todos los trabajadores, pensionistas, enfermos, inmigrantes, en contra de los servicios públicos de los que disfrutábamos y todavía no se nota una reactivación del empleo y la banca que ya vuelve a tener beneficios, el doble que en 2012,    ha costado a los contribuyentes mucho dinero sin contar los abusos y engaños de la misma como las preferentes, por poner un ejemplo. Lo que no dice este gobierno y tampoco lo dice Rajoy es que aún habrá más recortes que recaen siempre en los ciudadanos, en especial los más desfavorecidos, y que a ellos de los ajustes ni se han enterado por que nos se los han aplicado y que tampoco los han sufrido los más ricos del país que saben aumentar su patrimonio legal o de forma fraudulenta.

Tiempo de regalos

La navidad desde siempre se presta y es tradición de hacer regalos. La tradición sigue aunque estemos en crisis pero ya no se regala como antes. Las cestas de navidad de las empresas y de las corporaciones políticas han disminuido o incluso han desaparecido, a regañadientes, pero así ha sido este año. Recuerdo que cuando trabajaba Mª del Carmen recibía más de una de la propia empresa y de otras que tenían una vinculación estrecha con ella. En mi caso había algún regalo pero cestas no recibí nunca. Era una ayuda de tipo económico en especies que en esta época navideña no venía mal y te ahorraba comprar turrones, bebidas y otro tipo de alimentos que engordaban la despensa. La crisis de estos últimos años ha hecho que la abundancia de regalos que antaño se hacían ha disminuido considerablemente. En la situación actual de mi familia y ante la necesidad de tener personas distintas que cuidan a mi esposa, ya llevo tres años haciendo pequeños regalos como agradecimiento por todo lo que nos ayudan y que para mi resulta de un gran alivio. El año pasado regalé agua de colonia a todas, en total cuatro, y este año ya tengo los regalos preparados. Serán bufandas de abrigo para todas. También voy a regalar a Mª del Carmen una chaqueta de punto y dos jerséis de abrigo. Para mi me obsequio con un Router Wifi 4G con el fin de tener más velocidad al conectar Skype los fines de semana mejorando la calidad de las llamadas a Francia donde residen nuestro hijo, su esposa y nuestro nietecito que pronto cumplirá seis meses. También es casi seguro que me regale un teléfono móvil de los tradicionales aunque están desapareciendo reemplazdos por los actuales con más aplicaciones. Al final no tendré más remedio que adaptarme a los más modernos,

aunque mi hijo me dice que para mi son demasiado complicados. Lo único que quiero añadir es el recuerdo de antaño cuando la familia era más numerosa haciéndonos regalos unos a otros durante la nochebuena.