No fue posible

No fue posible la victoria del At. de Madrid para ganar por primera vez la Champions que se la llevó el Madrid sólo por tres minutos que el árbitro prolongó indebidamente ya que prácticamente se podía haber dado por terminado. No se sabe si fue por cumplir escrupulosamente los minutos de prolongación o que esperaba un gol del Madrid que suponía la prórroga. Naturalmente que el equipo colchonero se hundió en ánimo y juego ya que acariciaba la victoria perdiéndola en el último suspiro del partido. Lógicamente el equipo contrincante cogió confianza y fuerzas suficientes para vencer con resultado engañoso al At. de Madrid. Me ha sabido muy mal que el Madrid haya ganado la décima(no acabo de entender porque se contabilizan las anteriores de una época que no se corresponden con el nombre actual) a costa de un equipo como el At. de Madrid que esta temporada se la merecía. Como dicen algunos la suerte siempre recae en los mismos sin saber si es una suerte provocada o si realmente es suerte en el sentido literal del término, que siempre cae en el mismo equipo. Sin negar la calidad que con dinero tiene el Madrid es una lástima que tengamos que aguantar la prepotencia de un equipo "mimado" por los organismos oficiales, nacionales europeos e internacionales y de la gran mayoría de los medios de comunicación que siempre se arriman al poder y al dinero. Lo más lamentable es que eso supone un orgullo despreciativo hacia los demás que se demuestra en los propios jugadores, aficionados y directivos. Algunos de los que lean estas líneas pensarán que todo lo afirmado anteriormente es debido al resentimiento y el poco aprecio que tengo al Madrid y eso es verdad, para que negarlo, y más esta temporada que el Barça ha fracasado estrepitosamente. Lo que no puedo hacer es renegar de mi tierra y del club que lo representa aunque vivo en Madrid por circunstancias y situaciones que han hecho que eso sea una amarga realidad. Lo dejamos aquí, no puedo remediar tener nostalgia de Cataluya y del equipo el Barça que lo representa.

 

¡Qué mañana!

Hoy tocaba análisis de sangre para Mª del Carmen y justo hoy, después de más de quince días de sol, se ha puesto a llover con bastante intensidad a la hora de acudir al Centro de Atención Primaria para que le extrajeran sangre para el análisis. Ha sido imposible llenar los botecitos de orina con sus correspondientes tubitos para un análisis y casi perdemos la posibilidad del análisis de sangre por culpa de la lluvia. Llovía bastante por lo que hemos tenido que coger un taxi para llegar al ambulatorio con todas las dificultades que supone que Mª del Carmen suba en él. Si ya es difícil sin paraguas, la subida al taxi se complica mucho con lluvia y con paraguas para evitar mojarnos lo menos posible. Menos mal que al volver a casa después del análisis llovía muy poco lo que ha posibiltado volver andando a casa y menos mal que estábamos bastante apartados de los charcos que se forman cerca de las aceras evitando que un autobús que pasaba a bastante velocidad nos empapara de agua sucia como le ha sucedido a una mujer con su moto en el cruce de una calle cerca de los semáforos que regulan el tráfico. Ante todo esto no tienes más remedio que aguantar el chaparrón o no acudir perdiendo la vez, lo que supone que hay que volver a pedir día y hora al médico de atención primaria. Me he enterado tarde de que si el médico lo ordena cuando indica que se haga un análisis un paciente una enfermera va al domicilio a realizarlo lo que evita un montón de problemas a la familia. La próxima vez voy a pedirle el favor a nuestro médico lo que no quiere decir que lo consiga. Lo importante es que por esta vez, a pasar de la lluvia hemos conseguido que a mi esposa le hayan extraído sangre para un análisis importante ya que el médico quiere saber si los parámetros de los análisis realizados en el Hospital de la Princesa se mantienen o están modificados después del tratamiento que le añadieron  para la glucosa y el colesterol. 

Del análisis de hoy depende el tratamiento que el médico le va a aplicar cuando tengamos los resultados dentro de dos semanas.

Comenzó la campaña

Soplan vientos de derechas ya que parece, según los sondeos, que la derecha europea ganará al la izquierda y parece que aquí en España pasará lo mismo. Jamás he votado a la derecha ni  voy hacerlo puesto que ha demostrado históricamente y en nuestros días que lo único que defiende es el gran capital, a los que están instalados en el poder y una vez más se está demostrando con el PP al frente que la derecha es insensible ante los graves problemas sociales de España y del mundo, que lo único que les preocupa a los políticos de derechas es la macroeconomía ajena a los problemas reales de los ciudadanos. Por otra parte también la derecha política es más propensa a la corrupción que el resto de fuerzas políticas de centro y de izquierdas aunque no están exentas de corrupción igualmente. Los partidos de izquierdas, representados en España por el PSOE e IU, sobre todo el primero, no acaban  de convencer a los ciudadanos del cambio, el primero porque se le va a acusar que él es el que provocó la crisis y  no está claro si nos hubiera sacado de ella si gobernara hoy, lo que hace el PP con algunos signos de recuperación económica lo que le va a reportar votos mermando el crecimiento que el PSOE debería experimentar. En cuanto a IU, aunque cada vez va ganando más votos y más escaños no acaba de consolidarse como una alternativa de gobierno, y eso que sus votos son de verdad oposición fuerte a la derecha española. Esta vez tengo claro que mi voto será para Izquierda Unida porque creo que representa la izquierda real que se necesita para hacer cambios sociales profundos y permanentes y también porque el PSOE me ha defraudado ante el contencioso abierto entre el Estado Español y Cataluya. Aún siendo cierto que el PSOE defiende un Estado Federal para que Cataluya   encuentre su sitio en España como Estado prácticamente independiente, esta vez no está apoyando la aspiración soberanista de la Nación Catalana que no tiene el  apoyo del actual gobierno y de la mayoría de los partidos del arco parlamentario y también como no podía ser menos del Tribunal Constitucional. Habrá que esperar la oportunidad de conseguir cuanto antes nuestras legítimas aspiraciones aunque en este momento no se reconozcan con

la excusa de que hay que reformar la Constitución lo que nuestros "enemigos" no quieren.