viernes, 30 de diciembre de 2016

Ya quedan pocos

Los amigos que nos quedan se cuentan con una sola mano, ya quedan pocos, se hace difícil que nosotros visitemos a los que siendo amigos de antes están a una cierta distancia de casa puesto que el traslado de Mª del Carmen actualmente se hace prácticamente imposible, como ellos por diversas circunstancias no nos visitan sabemos que mantenemos su amistad pero ya hace años que nos nos juntamos como tiempos atrás. Los compañeros de trabajo de ella también hace más de un año que no nos visitan, tampoco llaman por teléfono ni se interesan por ella por medio de internet, son pocos con los que intercambiamos mensajes sobre todo por medio de Facebook, y entre ellos se puede decir que sus compañeros de trabajo brillan por su ausencia. Más bien son amigos de ambos, familiares de Monreal del Campo o de Olot, amigos de la sierra, amigos de antaño, no demasiados, y para de contar. Al final vivimos más bien aislados, con la cuidadora, las personas de los servicios a domicilio, las que acuden a dormir a casa desde hace un año
y los cuidadores de los Centros de Día a los que ella acude los días laborables y los fines de semana. Siempre ha sido difícil mantener a los amigos durante años, los de la infancia porque quedaron lejos de nosotros o han fallecido y los compañeros de trabajo, que no se les puede considerar amigos, salvo excepciones, tienen sus propias obligaciones y quehaceres lo que ha motivado el distanciamiento aun que los podemos considerar buenos amigos. La vida no ayuda demasiado para mantener a los amigos de antaño, cuando solíamos juntarnos ya en sus casas o en nuestro caso en la sierra. El paso del tiempo coloca a cada uno en su sitio, a medida que nos hacemos mayores nos puede visitar la enfermedad, nadie escapa de ella, las obligaciones sociales de cada familia nos distancian y todo ello propicia que la amistad perdure en el tiempo pero las visitas y los encuentros cada vez son menos frecuentes.

martes, 6 de diciembre de 2016

Tiempo sin ecribir

Hace bastante tiempo que no escribía entradas de ninguno de los cuatro blogs que redacto  casi todas la semanas los martes y miércoles debido a que Mª del Carmen ha pasado enfriamientos que la han obligado a quedarse en casa, tomar bastante antibiótico, la tuvimos que ingresar ocho días en el hospital y cuando le dieron el alta y regresó volvió a recaer, le mandaron diez días más antibióticos, ya parece que de momento se ha restablecido, todo ha vuelto a la normalidad por lo que yo hoy 6-12-2016 he reanudado la redacción de los blogs. Al comenzar diciembre está yendo a un Centro de Día al lado de casa, después de seis años nos hemos despedido de María Wolff por las dificultades que suponía no tener transporte, la lluvia y el frío que me obligaba a pedir eurotaxis o tener que llegar cuanto antes al anterior Centro con paraguas para protegerla de la lluvia. Cuando se deja de escribir por un tiempo suele ocurrir que han sucedido hechos importantes o rutinarios que son temas a redactar, eso es lo que ha sucedido esta vez, tengo situaciones vividas que relatar esta semana. la costumbre de no escribir produce una pasividad que poco a poco tengo que volver a recuperar. Por suerte la normalidad se ha instalado de nuevo en casa, puedo a volver a mis rutinas de siempre debido a que Mª del carmen ha superado los problemas de salud que tuvo, cuando ella tiene  algún achaque en casa se trastoca todo, para mi es una carga añadida en especial cuando se la tiene que hospitalizar o llevar a los médicos, cuando se tiene que quedar en casa para cuidarla, cuando se tiene que velar algunas horas por la noche, todo queda distorsionado lo que afecta a mis horas libres que son las que necesito en ese caso para escribir los blogs. Eso es lo que ha pasado, la dedicación especial hacia ella me ha impedido darme cita cada martes y miércoles durante algunas semanas para redactar mis blogs.